SUPERA LAS ADVERSIDADES

Nos ha tocado vivir en un mundo y una época en que todo cambia de forma acelerada, compleja y cada vez más competitiva. Este proceso obliga a las empresas a variar sus estrategias, no dejando nada al azar, adaptándose al mercado, generándose en las mismas un clima de incertidumbre, temores y precipitación que requieren un liderazgo no solamente centrado en los negocios, sino en las personas.
NO existe empresa que disfrute permanentemente de una tranquilidad sin alteraciones o tenga siempre buena suerte. Las organizaciones y las personas se sienten amenazadas por un número mayor de fuerzas que avanzan rápidamente, son impredecibles y resultan muy difíciles de controlar. Peter Druker decía “lo único que evoluciona por voluntad propia en las empresas es el desorden, la fricción y el bajo rendimiento”
Formamos parte de un mundo en el que todo está muy cercano, lo cual conlleva muchas oportunidades, pero también surgen infinidad de amenazas que debemos gestionar. Formamos parte de una sociedad global mucho más competitiva y sobre todo mucho más próxima. Cuando se produce un acontecimiento en un continente, afecta a los demás y viceversa de una forma mas inmediata que en épocas anteriores.
Cuando un país estornuda el otro se constipa. Varios bancos y compañías de seguros han entrado en situación de quiebra y los gobiernos han tenido que salir en su auxilio con el fin de comprar sus créditos incobrables intentando equilibrar el mercado financiero en el que se ha generado una crisis de confianza mundial de incalculables dimensiones.
La banca de muchos países entre la que se incluye España, había realizado inversiones en estos fondos, cuyas pérdidas les han generado una falta de tesorería importante que condiciona su estrategia de mercados y productos. Aparecen en el mercado ofertas de captación de depósitos por encima del precio del mercado interbancario y de la inflación y como contrapartida se encarece el precio de los préstamos y créditos. Se analizan los riesgos de los clientes de forma mas rigurosa y se evita financiar viviendas por encima del 80% de su tasación, el valor de las tasaciones desciende, el precio de la vivienda también, pero los consumidores no encuentran financiación acorde con sus necesidades, por lo que cae en picado la adquisición de vivienda nueva y de segunda mano. El que quería vender se espera y el que quiere comprar y tiene dinero también, porque intuye que los precios seguirán bajando. Todo esto genera una crisis no solo en el sector inmobiliario y en las empresas vinculadas a este, sino en todos los sectores y mercados repitiéndose una crisis de confianza. De hecho la rebaja de la calificación de España en el rating, tiene gran parte que ver con la desconfianza que genera el actual gobierno, con Zapatero a la cabeza, mas incluso que con los datos macroeconómicos en sí, que siendo malos son mejores que nuestra imagen.
Esta situación influye, en la nuevas empresas en que tenemos casi imposible el acceso a la financiación y al crédito, el caso curioso ,que no te dan dinero, mas que si lo tienes (absurdo) y que te dicen: no de aquí 3 años todo será mas fácil (evidente si la empresa sobrevive seguramente de aquí 3 años ya no los necesites).
En las empresas existentes, si crecen no tiene claro si la banca querrá crecer a su misma velocidad en financiación, si se estancan temen que la banca pierda su confianza y les rebaje las líneas y si entran en perdidas tienen claro que la banca les cerrara el grifo.
Las empresa que hayan aprovechado la bonanza para capitalizarse, sobrevivirán, las que sus accionista estén muy capitalizados también si estos ponen su capital, todas las que han pasado esta época “tirando de pólizas de crédito” etc. tienen segura su desaparición, seguramente por quiebra dada la dificultad (lo hemos indicado antes) de vender en estos momentos donde los que tienen capacidad económica solo quieren “chollos” y la especulación está en su nivel mas alto de los últimos tiempos.
Ha llegado el momento de volver a la lógica las empresas deben estar capitalizadas con fondos propios, aunque se manejen con fondos de la banca, esto en primer lugar facilita mucho la negociación con las entidades financieras y además abarata el coste de la financiación ya que reduce el riesgo, con lo cual es mas fácil ganar dinero. Facilita la negociación con proveedores, ya que tiene seguro que van a cobrar lo cual facilita obtener mejores precios, lo cual facilita ganar dinero, si alguien no entendió lo de “Dinero llama a Dinero “creo que ya quedo claro.
Si quieres emprender, adelante el momento es ahora, pero no pienses en las subvenciones son difíciles, escasas, piden demasiadas cosas, y si te la conceden puede que luego no tengan dinero o tardan 1 año en pagártela.
En definitiva el momento de emprender es ahora, no esperes que sea fácil, pero quien lo necesita?